lunes, 7 de mayo de 2012

El difícil arte de escribir

La vida como intento de escritor no es sencilla. Consiste en dormir poco, hacerte menso, forzarte a arrojar aunque sea una línea al día, por aquello de no perder la disciplina; escribir (o intentarlo)  hasta hartarte, para luego darte cuenta que menos de la mitad de lo que escribiste no te gustó. Y por si fuera poco, es una batalla de egos (que no son tuyos), de críticas (malintencionadas), y de inspiración ninja, por aquello de que la cabrona es una maestra en el arte del escondite.